2010
12.30
Irás y no volverás. El desierto del Taklamakan.
Category: Asia Central, China, Ruta de la seda, UNESCO, Viajar / Tag: China, desert, desierto, Khotan, Taklamakan, Turphan, Yarkand / Add Comment
Atemorizante para viajeros, locales y lejanos. “Irás y no volverás”, “Entrarás y no saldrás”, esto es lo que significa Taklamakan en la lengua local Uigur. Es uno de los desiertos más áridos y, para los caravaneros de la ruta de la seda, un lugar de pesadilla. No se podía cruzar, era la muerte segura, así que se rodeaba. La ruta norte discurría por asentamientos-oasis entre el desierto y las montañas del Tien Shan. La ruta sur bordeaba las montañas de Kulum que más abajo se convierten en el Tibet.
Por si esto fuera poco al oeste lo flanquean las montañas del Pamir y al este los desierto de Gobi y Lop Nor. Taklamakan, ya duro de por si está rodeado a su vez por las cordilleras montañosas más grandes del mundo y otros dos desiertos casi tan duros como él. Ni hecho tendríamos un lugar más hostil, una encerrona natural.
El primer sitio que visito después de Kashgar es Yarkland. Aquí voy a la mezquita de Altyn. Se parece mucho a las mezquitas de Uzbekistan con elaboradas columnas de madera, aunque aquí pintadas en colores. Uno de los lados de la fachada suele estar abierto al patio.
En la mezquita de Altyn se puede entrar sin problema, caminando por el barrio antiguo he entrado en otra mezquita pequeñaja y el “encargado” me ha echado de una forma bastante desagradable. Que yo sepa de ninguna iglesia se echa a los no creyente. Si eres respetuoso y discreto no creo que molestes a nadie.
Cerca hay un cementerio lleno de tumbas musulmanas. Un hombre limpia en el silencio.
Que mejor sitio para echarse una siesta que entre el polvo y el sol.
Esta es la zona suroeste del desierto del Taklamakan. Hasta el siglo X había creencias budistas y se hablaba una lengua Iraní. Después vinieron los pueblos turcos que trajeron el Islam.
Yarkand fue importante en la ruta de la seda porque desde aquí salía la ruta hacia Leh en la India. Hoy es una ciudad pequeña, aunque como en cualquier sitio de China, hasta el pueblo más pequeño en el mapa resulta ser más grande de lo que te imaginas.
Desde aquí salgo hacia Khotan. Paso por la ciudad de Karguilik es de donde salen las expediciones al K2 por la parte China.
El bus me deja a las 11 de la noche en la estación. Abro la guía y busco el hotel que había elegido. No lo encuentro, ni el siguiente de esa guía, ni los dos primeros que había en la segunda guía… ¿estaré en Khotan? Llevo caminando una hora. ¿Cómo puede no haber cuatro hoteles? Yo dije Khotan cuando compré el billete, ¿no? El siguiente hotel apareció, se llamaba “Happy Hotel”, si, estoy en Khotan. La una de la mañana, que hambre.
En el restaurante comparto mesa y te con esta pareja. En los restaurantes siempre hay una tetera gratis a tu disposición. No teníamos idioma común pero eran simpáticos y agradables, nos echamos unas risas muertos de sueño y luego a la cama.
Melikawat, la antigua ciudad de Khotan. Una inmensidad vacía, polvo, una pastora de 14 años y algún resto de los antiguos edificios que recuerdan lo grande que fue esta ciudad. Como es un sitio poco visitado aún se ven trozos de cerámica por el suelo.
La pastora no es consciente de la historia por la que pastan sus cabras. Y es que el sitio es tan ruinoso que si no has leído sobre los exploradores del siglo XIX y principios del XX que venían por estas tierras buscando tesoros arqueológicos el sitio no dice mucho.
Khotan es sinónimo de jade, pese a ser una parada en la ruta de la seda Khotan ha sido conocido durante siglos por el jade de los ríos Karakash y Yurungkash, los ríos del jade negro y blanco respectivament. Khotan está en lo que se llama la ruta del Jade. La ciudad tiene cientos (cientos es cientos) de joyerías y paseando es fácil encontrar talleres dedicados al jade.
Quiero comprar una bola de jade de recuerdo. A parte de gorros no suelo comprar nada y y esto me apetece. Me cuesta bastante, pero al final encuentro un juego de bolas chinas en jade negro. Mi mochila se queja del peso.
Por la tarde vi un tumulto de gente en una esquina del centro de la ciudad. Me acerqué a ver lo que era. Montones de hombres compraban y vendían piedras de jade. Parece que la gente va a recogerlas a los ríos y después las venden aquí. Las guardan en recipientes con agua para que sean más atractivas y se puede ver a los compradores trajeados mirando las piedras con todo cuidado e iluminándolas con una linterna para ver si son opacas o translúcidas y así pagar el precio adecuado.
¿Estará homologado?
Me acerco al mercado del domingo. Veo la cantidad de gente por metro cuadrado, me compro dos plátanos y me voy. Es un mercado tan grande cómo el de Kashgar y no me apetece estar apachurrado por tanta gete.
Momias de 1500 años de antigüedad del museo local.
Se parece bastante al logo de Pizza Hut… pero no lo es.
Gorro local.
Un sitio de comida china Han.
Me toca decidir ruta a seguir. Puedo seguir por la ruta sur, pero por lo que leo suena complicado moverse aunque me atrae, si es complicado moverse no va a haber gente y eso siempre es atractivo. Por otro lado tampoco hay mucho que ver y cruzar hacia el norte por el medio del desierto del Taklamakan también suena bien. Si a mi me cuesta decidir ruta cómo sería de difícil para los mercaderes elegir la ruta norte o sur. Para mí al fin y al cabo no es más que coger un autobús con un nombre u otro.
Me apetecía cruzar el desierto, pero el autobús hace parte del recorrido de noche y yendo de noche no iba a ver el paisaje. Al final decidí que aunque no viese las 10 horas de desierto no pasaba nada, calculé que haría cuatro horas de desierto y decidí que eso era suficiente. Aunque la ruta sur también tiene cosas interesantes ¡¿Qué hago?!
Los últimos árboles que veo en horas.
Después de cambiar de opinión 20 veces por hora decido coger el autobús más largo de mi vida y cruzar el desierto. Aún no se si he cogido el autobús express de 20 horas o el normal de 25 y !eso que ya tengo el billete! Hay cosas de las que es imposible enterarse.
Voy por una carretera única. 552 kilómetros de asfalto cruzan el desierto. A los lados veo edificios con números, el primero del que me doy cuenta es el 80, son pozos o bombas de agua para regar los juncos y arbustos que han plantado a los lados de la carretera para que la arena no se coma la carretera.
Nunca se había construido una carretera en dunas de arena en constante movimiento, pero el petróleo encontrado ha conseguido lo que durante años parecía imposible, cruzar el desierto. Y lo más imposible aún, cruzarlo en sólo unas horas. Pese a lo prodigioso de la carretera aún sigue siendo un desierto y el mal tiempo puede cerrar la carretera durante días.
El autobús en vez de asiento tiene una especie de cama y voy recostado mirando por la ventan y se puede dormir bien para que el trayecto no parezca tan largo.
Tengo un “protector” muy majo hoy. No deja de sonreír y su sonrisa parece no caberle en la cara. Me invita a comer cuando e pregunto cuanto dura la parada y cada vez que miro hacia atrás su sonrisa me encuentra.
Viaja con su mujer a Urumqi. Ella no lleva burka, pero detrás del pañuelo no se la ven nada más que los ojos. No dejan de hablar en todo el viaje, él se ha sentado en el pasillo para estar más cerca de ellas, hablan por la tarde, toda la noche y por la mañana. Se ríen un montón y comparten mil cosas.Se ve que son felices juntos.
El desierto está rodeado por ciudades oasis, pequeños pueblos, cientos de invernaderos y cantidades de cultivos que se ven a los lados de la carreta. Al tomar el desvío hacia el interior del desierto aún había árboles, pero pronto solo quedan dunas de arena.
Voy a la parte de adelante a hacer una foto, los conductores me sacan un cojín invitándome a tomar asiento en la escalera para poder estar más cómodo y hacer fotos a mi aire, además así podíamos charlar un poco. Charlar en este caso significa más bien comunicarnos, no tenemos demasiadas palabras en común, pero nos quedan 16 horas de viaje para intentarlo.
Cuando el conductor que estaba al volante cogió un poco de confianza me pidió las gafas. Creo que me había visto en una parada y quería probarlas. Le gustan, me las quiere cambiar por las suyas, le digo que no, mis ojos son muy débiles necesitan unas gafas envolventes. A él no le importa mucho, insiste en quedárselas y le digo que se las cambiaba por el autobús. Ya tengo transporte para llegar a Xiam, espero que no consuma mucho.
Amanece y veo molinos de viento por la ventana. La última vez que vi unos fue en el este de Irán.
Hay cientos.
Es muy árido.
Al llegar a Urumqui decido superar mi masoquismo y coger otro bus de dos horas a Turpan, un total de 25.
Llego a Turpan. Esta ciudad está en la parte noreste del desierto del Taklamakan. En la antigüedad fue un oasis que traía su agua de las montañas por un Karez, un sistema subterráneo de recogida de agua para llevarla al pueblo. En Irán os hablé de esto, allí lo llaman Qanar pero la tecnología es la misma.
Jugando al ajedrez chino en el mercado.
¿Está pensando o está aburrido?
Veo la mezquita de Emin. El estilo redondeado del minarete y la base tan ancha son nuevos para mi colección de minaretes, es del estilo afgano, de 1777.
Hoy es una fiesta especial, son las siete de la mañana y los fieles se han reunido para orar. Es excitante, nunca te dejan entrar en una mezquita en la hora de culto. La gente se agacha de vez en cuanto, miran a los lados a menudo y rezan murmurando cuando toca. Muy parecido a una misa.
Después de la oración todos van a casa, es la tradición. Se mata un cordero y se cocina para comerlo en familia.
Cerca de Turpan están las ruinas de Jiaohe, están bastante destruidas así que para aderezar otra foto de ruinas os pongo a una china moderna.
La señalización es un poco deficiente, ¿no? “Al templo grande dos minutos”. Aún así es muy interesante y es patrimonio de la UNESCO.
Otra parada en el pequeño pueblo de Toyugou, bastante poco turístico y muy auténtico, ideal para terminar el día con el sol de tarde.
En el hotel de Turpan he tenido muchísima suerte, me he juntado con una pareja, una chica americana y un chico francés que han vivido en Shangai tres años y medio. A parte de ser supersimpático me hacen de intérprete todo el día, ¡estoy feliz! Se saben toda la comida y me cuentan mil cosas sobre China de las que jamás me hubiese dado cuenta. Estoy de maravilla.
Turpan está en la segunda depresión más profunda del mundo, después del mar muerto, a -154 metros de altura.
No se para que están estas camas en la ladera, pero como la imagen es peculiar la pongo.
Con esto estoy a punto de terminar mí recorrido por el desierto del Taklamakan, un nombre que ha resonado en mi cabeza durante varios años hasta que lo he podido ver. Para muchos será un nombre nuevo, pero estoy seguro que será de esos nombres que una vez que los conoces los empiezas a oír en la tele o ver en revistas de vez en cuando y te parecerá imposible no haberlos visto antes.
El conductor que nos ha estado llevando de un lado para otro todo el día me dice que hay un autobús nocturno dentro de dos horas para ir a Dunhuang, mi próxima parada. JB y Marian tienen el mismo destino, pensaban ir mañana pero cambian de idea.
Compro algo en el mercado mientras ellos hacen la maleta y nos metemos en el bus hacia Dunhuang para ir a ver las cuevas de los mil budas. Después de todo el día de un lado a otro me duermo al instante.
Zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz
[Shhhhh] Fernando
2010
12.28
Confesión.
Category: Ruta de la seda, Viajar / Tag: Confession, End, Viajar / Add Comment
Si alguno se pregunta por qué llevo tantos días sin contar nada es porque no he tenido tiempo material. Llevaba algo de tiempo retrasado con el blog y realmente el viaje lo he terminado. ¡SI! Cumplí mi objetivo y llegué a Xian, origen de la seda tan nombrada en esta página.
Este post solo es para contaros que aunque el viaje ha terminado el blog no, me faltan cosas por contaros. Sensaciones, imágenes, pensamientos, un video más y la razón de la vuelta la tendreis en los siguientes post.
Hoy no os cuento más, ha sido un post neutro, las sensaciones vuelven en el post de mañana… O pasado…
Un saludo, esta vez, desde España.
Fernando
Hola,
Si alguno se pregunta por qué llevo tantos días sin contar nada es porque no he tenido tiempo material. Llevaba algo de tiempo retrasado con el blog y realmente el viaje lo he terminado. ¡SI! Cumplí mi objetivo y llegué a Xian, origen de la seda tan nombrada en esta página.
Este post solo es para contaros que aunque el viaje ha terminado el blog no, me faltan cosas por contaros. Sensaciones, imágenes, pensamientos, un video más y la razón de la vuelta la tendreis en los siguientes post.
Hoy no os cuento más, ha sido un post neutro, las sensaciones vuelven en el post de mañana… O pasado…
No se que me parecía no poner ninguna foto.
Toda la vida quise probar los escorpiones o algo igualmente “inapetecible”, pero no debía tener un día aventurero, no las probé.
Un saludo, esta vez, desde España.
Fernando
2010
12.22
Flashback – Respuestas sobre Kirgistán.
Category: Asia Central, Kirguistán / Tags: no tag / Add Comment
Silvia se fue ya hace días. Cuando me contó su viaje de vuelto la pedí que escribiese un post sobre ello, pensé que me mandaría a tomar por saco, pero lo escribió. Yo estoy encantado, solo tengo que traducir al inglés y disfrutar de la historia, además estuvo de viaje con gente que pudo explicarla los problemas étnicos del país, pero mejor que os lo cuente ella:
Por Silvia Ocaña.
Después de haber estado 15 días en Kirguistán, he de decir que me ha sorprendido este país. Es uno de esos países a los que, cuando vas a viajar a él, tus amigos te preguntan: ¿para que vas allí?…si no hay nada… Lo cierto es que si te gusta la montaña, es uno de los mejores sitios para ir, y la gente es muy simpática y acogedora.
Estuve con Fer viajando por el país, el último lugar que visitamos fue Osh. Después de un par de días allí llegó el momento de separarnos, Fernando iba a China y yo tenía un buen tramo de carretera para llegar a Bishkek y coger mi vuelo de regreso a España.
Por la mañana, a las 8 am., nos presentamos en el bazar que es dónde se cogen las taxis compartidas y tras el consabido regateo te dejan en tu destino. Mi conductor era un ingeniero en energía, que como se había quedado sin trabajo, se dedicaba temporalmente a hacer de conductor para sacarse algo de dinero. Mis compañeros de viaje eran un chico que no sé a que se dedicaba, porque no hablaba nada y otro chico que estaba estudiando relaciones internacionales y que hablaba bastante bien inglés y es el que me hizo de traductor todo el camino.
Empezamos el viaje, y por el camino me fueron contando y preguntando mi opinión sobre un montón de cosas. Nada más salir pasamos por el barrio en el que empezaron los conflictos de junio, me comentaron que había sido un tema político; la versión oficial es que había habido una subida de la gasolina un tanto elevada y la gente se había echado a la calle. Como imagináis eso es sólo una excusa hasta para ellos, el petróleo sube o baja todos los días.
La versión no oficial es que cuando la URSS hizo la división de las fronteras hace un montón de tiempo no tuvo en cuenta las distintas etnias del país, quedó por tanto la etnia uzbeca dividida entre Uzbekistán y Kirguistán, además parece ser que aunque tienen un sistema democrático, todas las etnias no tienen el mismo peso en las decisiones que toma el Parlamento. En cualquier caso por lo que he podido deducir entre lo que me ha comentado la gente de allí y los artículos de los periódicos de la zona, es que un grupo de políticos empezó a exaltar los ánimos con consignas independentistas aduciendo que unos tienen más poder económico que otros, que los tienen discriminados, etc…
Parece ser que hubo refriegas entre la gente de la calle, con disparos, violaciones y ataques a comercios y viviendas. Todo esto acabó con una oleada de violencia en la que la mayoría de las casas y comercios de uzbecos fueron quemados, a veces con la gente dentro, y con unas 200.000 personas huyendo hacia la frontera de Uzbekistán (Osh, contaba entonces con unas 300.000 personas).
Todavía se pueden ver los restos de la revuelta y los coches y oficinas de ayuda de las ONG’s.
Para empezar bien el día, al poco rato, paramos a desayunar, y para que no digan que la gente de Asia central no es hospitalaria, me invitaron a desayunar.
Después de esto, seguimos viaje y paramos en otro pueblo a intentar coger un pasajero más para el taxi. Yo aproveché ese rato para ver un recinto en el que había una torre de vigilancia del siglo X, y también un mausoleo que podéis ver en la foto.
Mientras íbamos de viaje, veíamos un montón de puestos en la carretera, la mayoría eran de fruta.
Los mejores eran los de melones gigantes, ¡de los más grandes que he visto! A media mañana, paramos y nuestro conductor nos invitó a uno. ¡Estaba buenísimo!
La carretera va paralela al cauce del río Nairn, es un río enorme con unas presas gigantes que se construyeron después de la II Guerra Mundial, proporcionando energía a Kirguistán y a los países vecinos, aunque no les sale muy rentable. Stalin firmó una “concesión” para 90 años en la que Kirguizstán se beneficiaba de la exportación de energía eléctrica a Uzbekistán, pero a un precio infinitamente más bajo de lo que les cuesta ahora la producción.
La parte buena que tiene el pantano es que se puede pescar, vimos pescadores que iban en una barca hinchable, luego vendían sus capturas en unos puestos al lado de la carretera. Uno del coche nos habló sobre la colocación (no el de la foto, pero no sabía que poner debajo de esta) de las numerosas torres eléctricas de alta tensión. La llevó a cabo China y cuesta unos 200.000$ colocar cada torre. Habrá unas cien y teniendo en cuenta que Kirguistán es un país pobre, es normal que sus habitantes estén indignados y vean en esto la mano larga de los políticos.
Mis compañeros de viaje me preguntaron si me gustaba el pescado
Compraron un poco y nos lo llevamos para que nos lo frieran en un restaurante de la carretera a la hora de la cena. Vueltas que da la vida… en ese restaurante, me encontré a un kirguizo, que había aprendido algo de español en Cuba!!
Los kirguizos tienen su punto de humor.
La noche empezaba a caer y como la carretera no era muy buena, había accidentes de tráfico por todas partes. Paramos tres veces a ver si los accidentados necesitaban ayuda, allí es costumbre intentar ayudar como sea. Por suerte no había heridos. La cuarta parada no fue tan buena, un coche había caído a un sembrado dando la vuelta de campana. Habían muerto el conductor y su mujer, sólo se había salvado la madre de él que lloraba desconsoladamente.
Después de 15 horas de coche, a las 11 de la noche, llegamos sanos y salvos a Bishkek. Me despedí agradecida de mis compañeros de viaje deseándonos mutuamente mucha suerte.
Cogí un taxi que me dejó en el aeropuerto, sólo quedaba pasar allí la noche y un día entero de viaje para llegar a España. Pero eso es otra historia…
Silvia Ocaña.
¡Muchas gracias Silvia!!!
2010
12.20
El mercado de animales de Kashgar en video.
Category: Asia Central, China, Ruta de la seda, Viajar, Video / Tag: animal market, China, Kashgar, mercado de animales, Ruta de la seda, Ruta de la seda, Viajar / Add Comment
Este mercado no ha cambiado mucho en siglos, no importa quien escriba sobre él o la época en la que escriba, la descripción es la misma: “Un intenso caos de miles de animales se compran y se venden los domingos”. Sería un sacrilegio viajero no presenciar el espectáculo.
Sin duda esto merecía un video, aquí lo tenéis:
La música, como veis al final del vídeo, es local, la he grabado unos días después en Khotan, un lugar del que os hablaré en el próximo post.
Por si alguno os lo preguntáis, no hay pollos.
Pensaba que con el polvo levantado por los animales saldría de allí sonándome la nariz y encontrarme mocos sucios, pero estaba equivocado, eran directamente negros.
Una aclaración después del último post. No pasé a Pakistán, solo fui por la carretera china que lleva a la frontera. Hay veces que es difícil para mi explicar la ruta y para vosotros seguirla, así que por si acaso hago la aclaración.
Pronto historias del desierto del Taklamakan..
Fernando
Este mercado no ha cambiado mucho en siglos, no importa quien escriba sobre él o la época en la que escriba, la descripción es la misma: “Un intenso caos de miles de animales se compran y se venden los domingos”. Sería un sacrilegio viajero no presenciar el espectáculo.
Sin duda esto merecía un video, aquí lo tenéis:
http://www.vimeo.com/18009055La música, como veis al final del vídeo, es local, la he grabado unos días después en Khotan, un lugar del que os hablaré en el próximo post.
Por si alguno os lo preguntáis, no hay pollos.
Pensaba que con el polvo levantado por los animales saldría de allí sonándome la nariz y encontrarme mocos sucios, pero estaba equivocado, eran directamente negros.
Una aclaración después del último post. No pasé a Pakistán, solo fui por la carretera china que lleva a la frontera. Hay veces que es difícil para mi explicar la ruta y para vosotros seguirla, así que por si acaso hago la aclaración.
Pronto historias del desierto del Taklamakan..
Fernando
swfobject.embedSWF("http://www.vimeo.com/moogaloop.swf", "vvq-2635-vimeo-1", "800", "450", "9", vvqexpressinstall, { "wmode": "opaque", "allowfullscreen": "true", "allowscriptacess": "always", "server": "www.vimeo.com", "clip_id": "aaaa", "show_portrait": "0", "show_title": "1", "show_byline": "1", "fullscreen": "1" }, vvqparams, vvqattributes); swfobject.embedSWF("http://www.vimeo.com/moogaloop.swf", "vvq-2635-vimeo-2", "800", "450", "9", vvqexpressinstall, { "wmode": "opaque", "allowfullscreen": "true", "allowscriptacess": "always", "server": "www.vimeo.com", "clip_id": "18009055", "show_portrait": "0", "show_title": "1", "show_byline": "1", "fullscreen": "1" }, vvqparams, vvqattributes); 2010
12.15
Hacia Pakistán, la carretera del Karakorum.
Category: China, Ruta de la seda, Viajar / Tag: China, Karakorum / 4 comments
El camino a Pakistán cruza la cadena montañosa más alta del mundo, un terreno de naturaleza inhóspita al que parece no gustarle tener una carretera.
Se estima que en la construcción de la carretera murió un trabajador chino cada tres kilómetros.
Esta carretera tiene 1284 kilómetros. Se comenzó en 1960 como parte del plan de china para fortalecer los lazos con Pakistán. La terminaron en 1982.
Pakistán me llama la atención, pero lo descarté de mi itinerario, no me parece el mejor momento para ir. Me queda pendiente una de las estribaciones de la ruta de la seda para cuando el país se estabilice.
En Kashgar hay mucha gente en los albergues que van o vuelven de Pakistán ya que Kashgar es el punto de partida de esta carretera.
Me he juntado con dos franceses de rastas y un inglés un poco perdido para hacer un pequeño trayecto por esta carretera de paisajes alucinantes. El título habla de Pakistán, pero eso no es más que un recurso fácil para llamar vuestra atención, además no miento, he ido hacia allí, aunque sin llegar.
El río Ghez o Ghez Darya en lengua Uigur. “Darya” es como se decía río en Turkmekistán también. Lleva agua helada, al pasar por una zona estrecha los trozos de hielo se apelotona formando líneas por un rato.
Yaks pastando lo que queda del verano.
El trazado de la carretera no fue inventado en 1960, ha estado aquí muchos siglos, y muchos caravaneros lo han utilizados durante siglos al ser una estribación de la ruta de la seda que llevaba a los valles del Indus de Gilgit y Hunza.
Estoy a 4000. Metros.
Nunca había estado tan alto y ¡nunca pensé que llegaría a 4000 metros en taxi! Le decimos al taxi que baje por la carretera mientras damos un paseo hasta abajo. Hay que caminar despacio o la altura te agota en unos pasos. El cerebro parece flotar dentro de la cabeza, el mal de altura tiene que ser muy desagradable.
El cielo tiene un color claro por los 4000 metros menos de atmosfera que tiene que atravesar la luz.
Terreno interminable que te hace sentir pequeño, enano, minúsculo, insignificante, y a mi, me encanta esa sensación.
Pequeños glaciares. Por el camino hemos pasado varios controles de pasaporte, vamos paralelos a la frontera de Tajikistan.
Los franceses eran muy inquietos y se pasaban el rato haciendo el tonto en las fotos y me lo contagiaron.
La carretera tiene un mantenimiento constante ya que el terreno es salvaje. China está haciendo un sistema de túneles en las montañas laterales para reconducir el agua y que las crecidas repentinas y los derrumbes no dañen la carretera.
El lago del Karakul, a 3500 metros de altura. Más lenguas glaciares al fondo.
Un lugar duro para vivir.
Sobre el hielo. El “moon walk” sale muy bien.
Camello Bactriano.
Ahoa se utilizan principalmente por su carne y sus pieles. Antes hacían esta ruta cargados de mercancías y el camino era dificil, el pase montañoso a Pakistán esta a 4722 metros de altura. Se llama Khunjerab que significa “Valle de la Sangre” por el la cantidad de bandidos que asaltaban las caravanas.
En una bajada a hacer fotos apareció un hombre de ninguna parte. Echó al suelo una pequeña tela llena de manualidades hechas por él y dijo “small bazar” (pequeño bazar). Parece que nadie pueda vivir agua.
Estas montañas del Karakorum y del Himalaya son las más jóvenes del mundo. Siguen creciendo cada año, empujando hacia arriba con el vigor de la juventud relativa de 55 millones de años.
Nos volvemos a Kashgar. El aire súper puro de la montaña me ha recargado de energía y mañana me voy hacia el desierto del Taklamakan.
Hasta pronto.
Fernando
2010
12.13
Kashgar mítica y ¿China?
Category: Asia Central, China, Ruta de la seda, Viajar / Tag: China, Kashgar, Ruta de la seda, Ruta de la seda, Viajar, Uigur, Xinjiang / 1 comment
Mientras me alejo del puesto fronterizo kirguizo miro a mí alrededor. Es tan improbable que vuelva a estar aquí que quiero recordarlo. Una pared de roca roja al otro lado del desfiladero donde estoy, impone. Alta montaña sin la más mínima vegetación, un lugar desolador lleno de silencio que muy de vez en cuando interrumpe un trailer sucio de los que dejan pasar con cuentagotas. Un vaho denso y blanco saliendo de mi boca hasta que desaparece congelado, no hay viento, a veces lo atravieso al caminar. En un alto, una torre de vigía, me imagino un guardia aburrido añorando su casa mientras yo estoy encantado aquí. El río lleva poco agua y hace curvas suaves en un lecho de piedras grises, a lo lejos lo pierdo de vista, ¿Cuánto tardará el agua en llegar al mar desde este sitio tan rematadamente remoto? Militares con largos abrigos verdes y gorros de piel que les tapan las orejas. No veo pájaros, no existe razón para venir aquí. Un edificio que parece de estación de esquí abandonada. Un mástil oxidado con una reluciente bandera China más cercana a cada paso.
Es un sitio de paso, nadie querría estar aquí mucho tiempo. El entorno es precioso pero no hay nada más. Dentro de mí, el entusiasmo de un nuevo país al que tenía ganas de llegar. Casi, necesidad de llegar, ya que me lo había propuesto.
Viniendo tan poco a poco, se me han acumulado las ganas de ver China, hasta hace poco la veía lejos. Además me apetece cambiar, después de tantos países musulmanes y de dos meses en Asia Central quiero empezar a ver cosas diferentes. Aquí os cuento la llegada y lo que me ha parecido Kashgar, la más mítica ciudad china de la ruta de la seda.
El primer chino con el que me encontré fue, por supuesto, el guardia fronterizo. La portada de mi pasaporte hace tiempo que está tan raspada que no tiene dibujo. El escudo de España solo se intuye si sabes que existía y del nombre del país solo tiene algo de la “e”, la “s” y la “a”. Cumpliendo con su trabajo me preguntó de donde era.
Debía ser la única palabra en inglés que conocía “¿country?”. Yo le dije “Spain“ pero no me entendió y seguí probando con las variantes que más suelen funcionar: “Espain“, “España“, “Spanski“… Como seguía con la misma cara de “ni idea”, probé con el comodín: “Europ“… miró el visado chino e hizo un mínimo signo de aprobación y me dejó pasar.
Mi cabeza dijo… “joeeeee, lo que te va a costar moverte por aquí…” pero me ignoré, prefería no ser consciente de ello.
En China… Pues pagodas, templos, budismo, confucionismo… y ¿burkas?
Claro, las fotos son escondidas, instantes robados. Si no pueden enseñar la cara, ¡como para estar en la cámara de un extranjero infiel!
No he visto burkas en todo el viaje, no se si una en Turquía, pero creo que no. No esperaba verlos en China.
Estas fueron tierras budistas hasta que la ruta de la seda trajo esta nueva religión que se expandía rápidamente. De pueblo en pueblo, de caravana en caravana, así llegó el Islam, y aquí se quedó.
Xinjiang en la región más al oeste de China y la mayoría de su población es Uigur. Los uigures son una minoría china que además de religión diferente tienen diferentes costumbres, cosa que al gobierno central le cause más de un quebradero de cabeza en ese afán que tienen los regimenes totalitarios de tener una unidad cultural total en un país.
Con respecto al Islam yo me pregunto si ahora es más fuerte por una reacción de diferenciación con el resto de China, por acentuar las diferencias con la mayoría Han que supone el 90% del país, para ser largamente diferentes a lo que el gobierno intenta imponer poco a poco. No se la respuesta pero la verdad que parece que no hayan cambia do sus costumbres en muchos siglos.
Quería comprar uno a ver cómo se veía. Luego se me ha ocurrido que sería interesantísimo salir por Burgos o por Madrid un día con un burka para ver cómo te mira la gente. ¿De donde puedo sacar uno? Sería un buen video.
Para mi la comida china es una razón suficientemente justificada para venir a China… Creo que hablo demasiado de comida, vais a pensar que soy un glotón. ¡por fin puedo comer un cerdo agridulce de verdad!… ¿o no? Para empezar son musulmanes así que no he visto ningún cerdo alrededor…
Pues no, mi primera comida no fue otra que Laghman, la sopa de fideos que he estado comiendo en toda Asia Central. Estaba realmente pero la mayor diferencia es que esta vez la comí con palillos, si no fuese por eso pensaría que seguía en Kirguistán.
Las caras son iguales, los ojos son idénticos, el tono de la piel es igual… Pensé que las inmensas cordilleras Tien Shan y el Pamir habían sido más efectivas para hacer una diferencia entre las regiones de los dos lados. Hay veces que cruzo una frontera y noto al instante un gran cambio, otras, los cambios son pequeños, graduales, como esta vez. Hay libros en los que esta región la mente en la definición de Asia Central junto con las cinco ex repúblicas soviéticas. Con lo que he visto yo también la incluiría.
El Laghman está en la lista de platos que quiero intentar cocinar cuando vuelva a España. Si, tengo una lista de cosas deliciosas que quiero seguir comiendo el resto de mi vida. La de cosas que no quiero volver a comer, no hago lista.
Kashgar rivaliza en gorros con Kirguistán, en realidad yo creo que gana. Aquí tenéis el link al video sobre los gorros de Kirgistán.
Más gorros. Ls rostros podría ser kirguizos o uzbecos.
¿Veis los carteles? Caracteres chinos y ¿árabes? Es Uigur que es una lengua turquica (lenguas turkmenas) parecida a otras de Asia Central pero escrita en un alfabeto derivado del árabe.
Una estatua de Mao de 18 metros en medio de la ciudad. No creo que a los Uigures la aprecien mucho.
Queda algo de arquitectura antigua con arcos y balcones en el primer piso. La ciudad está entera en obras, destruyen estas cosas con historia para hacer feos edificios de cemento de montones de plantas. La ciudad está llena de polvo de las obras y el desierto, si el mayordomo hiciese la prueba del algodón en cualquier sitio se mancharía hasta los nudillos.
Kashgar es una ciudad mítica en la ruta de la seda, seguramente para muchos sea un nombre nuevo del que no se sabe nada pero Marco Polo ya habló sobre su importancia comercial en 1275 cuando estuvo por aquí. Llamaba a la región Catay y desde aquí salían rutas hacia la India. Era una ciudad oasis al oeste del desierto del Taklamakan. Aún hoy tiene el que quizá es el mercado más importante de Asia Central.
Kashgar está en el extremo oeste de China, si lo miras en un mapa con la inmensidad que es china parece estar en la misma frontera. Es la última ciudad, la que da paso a Asia Central es del Turquestan este. En alguna esquina parece que podrías estar en cualquier sitio de oriente próximo.
Hoy en día Kashgar y la región de Xinjiang vuelven a ser importantes. Su localización es vital para la expansión de China hacia el oeste. En esta región hay 14 puertos terrestres abiertos a los ocho países con los que hay frontera. Once aeropuertos internacionales, cientos de kilómetros de vías y carreteras en construcción, la única carretera que cruza un desierto de arena en movimiento y explotaciones petrolíferas.
Beijing está fomentando el desarrollo económico con el objetivo de apoyar sólidamente la expansión hacia el oeste. China no se puede permitir perder esta región con los movimientos independentistas uigures y espera que esta inyección económica genere una calidad de vida suficiente para apague los instintos de independentismo
Este cartel estaba en la mezquita Id Kah, la mezquita más importante de la ciudad. Dejo a vuestra elección la interpretación.
Aquí tenéis la traducción de este párrafo que estaba después de hablar del dinero que se había empleado en rehabilitarla: “Todo esto muestra totalmente que el gobierno chino siempre presta especial atención a otras culturas históricas de los grupos étnicos, y que todos los grupos étnicos aceptan cálidamente la política religiosa. También demuestra que los diferentes grupos étnicos han establecido una relación cercana de igualdad, unidad y ayuda para cada los demás y que la liberta d de credo esta protegido. Aquí todos los grupos étnicos viven amigablemente juntos. Cooperan para hacer una bonita patria, soportan efusivamente la unidad de los diferentes grupos y la unidad de nuestro país, y se oponen el separatismo étnico y a actividades religiosas ilegales”.
Pan adictivo.
Hay mucha vida en la calle pese a que hace frío. El sol engaña.
¿Qué os está precede esto? Yo estoy un poco decepcionado. Es bonito, es interesantísimo y es absolutamente exótico. ¡Pero se parece un montón a Asia Central! Había leído sobre muchas similitudes, pero esperaba más diferencias. ¡Y a mi me apetecía cambiar! Llevo unos días bajo de energía, quizá estoy cansado y no me he dado cuenta.
Esperaba que un cambio, ver cosas nuevas me diese la pequeña dosis de energía y entusiasmo que me falta pero al no haber mucho cambio me he quedado un poco apagado. Encima moverse por aquí es algo más difícil que en otros sitios y me quedan 4381 kilómetros en línea recta hasta Beijing. Como he estado algo bajo de energías no he planeado nada y ahora me está fastidiando no haber planeado y haber estado una semana entera aquí parado.
En el mercado del domingo, pero esto os lo cuento en el próximo post.
¡Tengo que espabilar y moverme!
Hasta pronto.
Fernando
Idioma
¿Donde Estoy?Where am I?
Esta sección ya no tiene sentido, el viaje ha terminado, pero en el blogs os seguiré contando lo que falta.
Way Away
Países-Countries
España Francia Italia Eslovenia Croacia Bosnia Montenegro Albania Grecia Turquía Siria Jordania Iraq Georgia Armenia Irán Turkmenistán Uzbekistán Kazajstán Kirguistán China
Links
Archivos
© mi ruta de la seda. Powered by WordPress and Pyrmont V2.
var gaJsHost = (("https:" == document.location.protocol) ? "https://ssl." : "http://www."); document.write(unescape("%3Cscript src='" + gaJsHost + "google-analytics.com/ga.js' type='text/javascript'%3E%3C/script%3E")); try { var pageTracker = _gat._getTracker("UA-12055183-1"); pageTracker._trackPageview(); } catch(err) {}
No hay comentarios:
Publicar un comentario